La seguridad de cualquier trabajador debe ser una máxima en las empresas. Pero hoy queremos acercarnos al peligro un poco más, repasando algunas de las profesiones con más riesgos que existen.

La Prevención de Riesgos Laborales incluye un apartado importante dedicado al vestuario laboral, que debe reducir los peligros a los que se enfrente el empleado. Vamos a ver qué es lo mejor para los diferentes casos.

10 profesiones peligrosas en nuestro país

Bomberos y guardias forestales

Abrimos esta lista de profesiones peligrosas con aquellos que luchan contra el fuego, uno de los elementos más devastadores. También los verás en cualquier tipo de emergencia, por lo que su vestuario laboral debe constar de ropa ignífuga, casco de seguridad, guantes y botas.

Fuerzas de seguridad

Teniendo en cuenta que militares, policías y otro tipo de cuerpos de protección se enfrentan a multitud de situaciones, es normal valorarla como profesión peligrosa. Suelen llevar armas mortales (y encontrarse con ellas), por lo que su protección debe constar de chaleco antibalas, calzado de seguridad, guantes y casco.

Profesionales sanitarios

A pesar de que las condiciones normales de un trabajador de la salud no debería situarlo como profesión peligrosa, sí que hay casos que pueden llegar a serlo. Los Técnicos en Emergencias Sanitarias, los que atienen urgencias o quieres se exponen al contagio de enfermedades deben llevar la vestimenta laboral adecuada. Gantes de protección y mascarilla es lo mínimo.

Trabajadores marítimos

Incluiremos aquí tanto a pescadores de alta mar como a buzos y rescatadores. Son muchos los factores que convierten a este sector en un nido de profesiones peligrosas, por lo que su protección debe ser máxima. Uniformes de alta visibilidad, calzado antideslizante y guantes debe ser innegociable.

Transportistas y conductores

A pesar de haber descendido poco a poco las cifras de fallecidos en carretera, durante los últimos años se ha estancado y no baja como antes. Estos trabajadores pasan la gran parte de su jornada laboral al volante, por lo que las posibilidades de sufrir un accidente son muy altas. La protección aquí es la misma que para cualquier conductor: cinturón de seguridad, airbags y señalizaciones como triángulos y chalecos.

Trabajos en altura

Aquí también podemos incluir a varias profesiones peligrosas como constructores, limpiacristales, taladores de árboles… Todos tienen en común su desempeño a alturas por encima de dos metros, por lo que cualquier fallo puede ser mortal. La vestimenta laboral debe incluir un arnés de seguridad, dispositivos anti caídas y casco de seguridad; como poco.

Minería

A pesar de que se sigue trabajando en la prevención de riesgos laborales dentro de una mina, sigue considerándose una profesión peligrosa. Los accidentes no paran de ocurrir, por lo que la protección individual es muy importante. Uniformes de alta visibilidad, cascos de seguridad, guantes, calzado, mascarillas…

Gestión de residuos

La recogida y clasificación de la basura es también una profesión peligrosa, especialmente por los gases que pueden inhalarse. Los residuos tóxicos o vertidos peligrosos puedes ser fatales, así que el vestuario laboral debe incluir, al menos, mascarilla, guantes y calzado de seguridad.

Trabajadores con alta tensión

Cualquiera de los empleos que tengan algo que ver con la electricidad es potencialmente peligroso. Los operarios pueden sufrir una descarga que ponga en peligro su vida, por lo que deben estar protegidos con guantes y gafas de seguridad, así como elementos aislantes.

Industria pesada

Cerramos este repaso con aquellos trabajadores que manejan maquinaria industrial, capaz de poner en riesgo la vida de alguien. Al tratarse de una profesión peligrosa, la vestimenta laboral estará compuesta por gafas de protección, botas reforzadas y todo aquello que proteja de la propia máquina.